De camino al vértice se nos cruzó un jabalí y estuvimos a punto de tener un accidente. El animal salió de sopetón de uno de los campos de cultivo que había junto a la carretera, pasando a un metro escaso del morro del coche, a pleno trote -menudo frenazo y mayor susto el que nos dió el aminal-.

Después de varios intentos infructuosos, dimos con el hito y pudimos hacer la activación. A diferencia del día anterior que nos llovió, este día hizo un sol de justicia.

Cuando estábamos a punto de terminar la activación, vino una ráfaga de viento muy fuerte y el log y la sombrilla salieron volando -y nosotros de trás-, menos mal que lo conseguimos recuperarlo.

Como no hay dos sin tres, tras desmontar decidimos coger uno de los caminos que pasaban por delante del hito y que estaba mucho mejor que por donde vinimos, pensando que como habían pasado varios vehículos estaría mejor y sería más rápido y seguro, pues no, craso error pues nos pérdimos en un camino interminable que sólo nos llevaba a través de campos y más campos de cultivo, al final tuvimos que desandar lo andado y buscar por donde habíamos venido. Costó, pero conseguimos llegar al pueblo y de ahí a casa, eso sí, con la correspondiente caravana que se había formado con la vuelta a casa después de este fin de semana largo.

Gracias a todos por estos ratos de radio.
Nos escuchamos pronto desde la próxima aventura.

73 de Kin.